Las joyas del cine independiente, no tan difundidas como las películas producto de la vorágine mediática, suelen ofrecernos experiencias y narrativas cautivadoras. Son una bocanada de oxígeno puro en medio de la contaminación.
Hoy en Poetripiados haremos un breve recorrido con tres trabajos que me parecen son muy buenos para quienes no se han adentrado en este campo de la cinematografía. No solo exhiben habilidades técnicas excepcionales, sino que también sirven como laboratorios creativos, expandiendo los límites de la animación y proporcionando experiencias cinematográficas memorables en un formato compacto y accesible.
Rakvickarna
Comenzaremos con un cortometraje que combina lo cómico, extraño y desconcertante. Su director es Jan Švankmajer, nacido en Praga, Checoslovaquia, en 1934. Este artista es conocido por ser un referente en el surrealismo y por sus trabajos en el campo de la animación, en los que suele mezclar varias técnicas para crear obras que lo mismo le han atraído seguidores que detractores, por lo bizarro que resultan.
Rakvickarna fue estrenado en 1966 y es considerado uno de los cortometrajes más inquietantes en la cinematografía, en la que participan un conejillo de Indias vivo o cuyo, además de dos marionetas. La historia puede ser vista como una sátira subversiva de la humanidad, especialmente de nuestras actitudes hacia los conflictos. Fue realizado durante la Guerra Fría, haciendo comedia de los ideales capitalistas versus comunistas, y de alguna manera se burla de la hipocresía mecanizada del comunismo y de las inclinaciones codiciosas del capitalismo. Mientras los conflictos se extienden, la naturaleza representada en el cuyo, es indiferente a nuestras luchas, continúa sin nosotros.
Es en stop motion y te pondrá a pensar:
Harpya
Harpya, realizado en 1979 por el renombrado cineasta belga Raoul Servais, fallecido en marzo de 2023, nos sumerge en los rincones oscuros y perturbadores de la psique humana. En esta pieza Servais introduce a Zonderling, un personaje acosado por la presencia de una misteriosa arpía. La narrativa, marcada por la ausencia de diálogo, se despliega a través de una impecable combinación de animación y acción en vivo.
El relato explora temas de obsesión, deseo y el enfrentamiento con la propia naturaleza. La arpía, simbolizando la manifestación de las pulsiones primarias y oscuras del protagonista, lo arrastra a un mundo onírico y grotesco. La cinematografía de Servais, se caracteriza por sus imágenes surrealistas y la utilización de técnicas innovadoras.
La obra, aunque breve, deja una impresión duradera y muy loca gracias a su intensidad visual y a la habilidad del director para provocar emociones profundas en el espectador. Es un viaje cinematográfico que desafía las convenciones narrativas y visuales, y que seguro te pondrá a reflexionar igual que el anterior. Solo tienes que hacer click a continuación en “Ver en YouTube”.
Fire
Fire, elaborado en 2015, es uno de los enigmáticos cortometrajes de David Lynch, con el que sumerge a los espectadores en una experiencia audiovisual intensa y enigmática que logra condensar la habilidad distintiva del director para crear mundos oníricos y evocativos.
La narrativa, en su aparente simplicidad, sigue a un hombre en una habitación oscura que experimenta un fuego controlado, pero la fuerza expresiva de Lynch transforma esta escena en una experiencia sensorial única. La banda sonora, compuesta por el propio Lynch, agrega capas de misterio y tensión a la trama, mientras que la cinematografía juega con luces y sombras, creando una estética visual intrigante. Es todo un viaje, aunque no es para todos, debido a escenas repititivas que suelen sacar de la realidad a quien intenta sumergirse en la obra.
Fire se convierte así en un lienzo poético donde la simplicidad aparente oculta un significado más profundo y metafórico. Estamos seguros que te mantendrá intrigado por las imágenes y música. ¡Disfrútalo!