El mundo, como un libro, se divide en dos
El mundo se divide en dos: los que leen y los que no leen. Si tú eres del segundo grupo y quieres enamorar a un chico o chica del primer grupo, toma en cuenta estos tres tips aprobados por el consejo técnico de Poetripiados.
Ve a una librería: si quieres pescar vas al mar, si quieres pescar un lector, vas a la librería. Espera, no pienses que morirás de aburrimiento, hay librerías con servicios de restaurante o cafetería, puedes disfrutar de una bebida o una buena comida, antes de ir a husmear entre los libros para ver qué lectora o lector distraído te encuentras con el que puedas entablar una conversación.
No intentes parecer un lector: Ya estás en la librería y conectaste con un lector. No intentes parecer uno de ellos; es obvio que no lees, tu mirada que no tiene los ojos a medio abrir, te delatará. Entonces, lo peor que puedes hacer es fingir que sí lo haces. Los lectores son sagaces y sensibles, si pretendes hacerte pasar por alguien que ama leer y no lo eres, quedarás como un tonto de inmediato y él o ella se sentirá ofendido y engañado, y como en aquella novela policiaca de Taibo II, No habrá final feliz. Por cierto, podrías iniciarte en la lectura leyendo esta buena obra.
Di que no lees: mejor empieza reconociendo que no eres un lector, pero puedes decir, si en serio lo crees, que admiras a la gente que lee (a los lectores les gusta que les soben el ego) y que siempre has querido leer para saber tanto como él/ella. Esto es infalible, porque a los lectores les interesa compartir con otros lo mucho que han leído. Y quién sabe, si acompañas esa confesión con un café, quizá empiece a recomendarte libros y ahí tienes ya un pretexto para pedirle su WhatsApp.
La puerta a un paraíso personal
Si puedes llegar hasta este último paso, lo demás depende de tus cariños y detalles como con cualquier pareja, con el añadido de que tienes la impagable oportunidad de amar a alguien que lee, y en ese tránsito, amar la lectura. Y eso, créelo, puede darle un vuelco a tu vida de una manera positiva, ya que leer es una puerta de entrada a un paraíso personal que ahora podrás compartir con alguien que amas y que al mismo tiempo, compartirá contigo el amor por la lectura.