marie laurencin se sintió ambivalente al terminar su relación con apollinaire:
detectó que el cubismo científico era una propuesta de excesiva masculinidad:
me siento perfectamente cómoda con todo lo que sea femenino -dijo al encender un puro- sus pinturas tienen una atmósfera de ensueño y sus tonos son tan suaves como las primeras miniaturas persas
(apollinaire había sido arrestado acusado por estar relacionado con el robo de la gioconda del louvre
testigos lo asociaron con los roba muesos gery piéret y vincenzo peruggia
y en la declaración el poeta implicó a picasso:
tal vez querían hacer una copia del cuadro y entregarlo -increparon los detectives-
pero la obra volvió a su pared de costumbre
y ambos fueron puestos en libertad
pero eso fastidió a marie de laurencín
y soñó que al poeta le pegaba un obús en la cabeza)
picasso los había presentado en el salón de los independientes:
entre el vino y la desnudez la diversión era un cohete espacial
y en los momentos de paz de la esperanza violenta el poeta había escrito su mejor obra
mientras los aviones bombardeaban el centro de la ciudad
ella rompió su cuerpo para que no quedaran dudas
y se adentró en la noche con un flequillo triste y escote triangular a mitad del pecho y un lazo en un hombro y nariz grácil y boca dibujada como un beso congelado en la cara
la esbeltez picuda de sus pies ascendía hacia unos muslos densos a punto de abrir un ramo de flores entre la borrosidad cálida de la bruma que succiona y desdibuja el paisaje:
pero ese amor ahora es parte de una charla intrascendente donde nadie conoce a nadie:
y viendo su sombra marie de laurecin olvidó que su sexo era cuadrado
y pintó un autorretrato y luego muchos más hasta su muerte:
una difusa imagen en paleta de grises
compensada por el color rosado de los labios y el rubor de las mejillas
y el contorno de su bata rosa entrecruzada por el frente formando un corazón sobre su pecho
en el cual se posa una mano delicada:
ilustró alicia en el país de las maravillas de lc
y obras de andré gide max jacob saint-john perse marcel jouhandeau jean paulhan
se convirtió en retratista oficial del mundo de la moda y la farándula pintó a nicole groult colette
mientras el mundo se alistaba para otra guerra mundial:
marie laurencin desde fuera de la tela mira esquiva con sus ojos negros
la confrontación de la semblanza onírica y decorativa
cuando sus cuadros adquieren una fachada de lánguidas figuras melancólicas en un juego de espejos como trigales devastados por bombas de hidrógeno:
en realidad todo eso le importa un carajo
se pasó la vida pintando mujeres: sopranos actrices modelos
y la crítica señaló que frecuentemente la artista francesa proyectaba su propia imagen en todos los cuadros
y eso también le importaba un carajo
porque pocas personas se parecen a su propio retrato
y su vida poco se parece a su vida
pero cuando pintó portrait de mademoiselle chanel (ahora en el musée de l’orangerie de parís)
coco chanel encabronadísima lo rechazó porque no se parecía a ella
y a los pocos días llegó helena rubistein a pedirle un cuadro
y le entregó ese mismo
y se fue encantada

marie laurencín: un ejército solitario entre un millón de guerras
La confrontación de la semblanza onírica y decorativa