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La Ciudad Juárez de Bolaño: Un oasis de horror en un desierto de aburrimiento

El último bohemio prístino, el último poeta roto, el último gran escritor de la literatura hispanoamericana, no cabe duda, es Roberto Bolaño. El escritor chileno, aunque pasó su adolescencia en la Ciudad de México entre los años 60 y 70, jamás puso un pie en esta frontera. De hecho, el autor vivía en España desde […]

Se trata de una de las mejores novelas escritas en español

Por Israel Holtzeimer / 7 de mayo de 2025

El último bohemio prístino, el último poeta roto, el último gran escritor de la literatura hispanoamericana, no cabe duda, es Roberto Bolaño. El escritor chileno, aunque pasó su adolescencia en la Ciudad de México entre los años 60 y 70, jamás puso un pie en esta frontera. De hecho, el autor vivía en España desde hacía muchos años cuando las noticias de los terribles feminicidios de Juárez pasaron a ser portada en el mundo entero durante los años 90.

Sin embargo, a principios del siglo XXI, ante un terrible diagnóstico y la posibilidad de una muerte próxima, el escritor decidió embarcarse en una colosal obra, su último libro jamás escrito: una novela río llamada 2666, cuyo escenario principal sería Ciudad Juárez.

Mil doscientas páginas y una decena de personajes que, por una razón u otra, terminan en Santa Teresa, una ciudad fronteriza del norte de México, cuya serie de asesinatos cometidos contra mujeres se convierte en el eje narrativo y trastoca la vida de todos ellos.

Publicada en 2004, poco más de un año después de la muerte de su autor, 2666 se convirtió en un éxito inmediato, siendo traducida al inglés en 2008 y volviéndose el foco de muchos estudios sobre el contexto de la obra, la impunidad y la desolación.

No se necesita una interpretación profunda para saber que Santa Teresa es sólo un sobrenombre de Ciudad Juárez. Durante su investigación y escritura, el autor chileno lo dejó muy en claro. Está perfectamente documentado que Bolaño metió las narices en todo libro y texto que encontró sobre los asesinatos de mujeres en Juárez: la similitud de los casos que narra, los paisajes, el delirio, el caos… todo es, tristemente, idéntico a esta frontera.

El título de la novela, 2666, hace referencia al año 1999, claramente invertido, tal vez como un espejo del mal que se vive en Ciudad Juárez. De allí también la referencia al número de la bestia, y es que la violencia permea cada una de sus páginas, incluso más allá de las fronteras físicas de este lugar. En algún momento, esta elefantiásica obra puede interpretarse como una historia sobre la maldad que rige el mundo, cuyos caminos más inesperados desembocaron en estas tierras áridas.

Hablando de ello, su epígrafe es demoledor, sacado de Las flores del mal de Charles Baudelaire, el poeta maldito por excelencia, y que cita: “Un oasis de horror en medio de un desierto de aburrimiento”. ¿Qué ciudad es ésa? Quiero saber cómo se llama.

Apenas el año pasado, The New York Times publicó la lista de las 100 mejores novelas del primer cuarto de siglo, y 2666 resultó ser la novela escrita en español mejor situada, en el sexto puesto, si bien recuerdo. Y el prestigioso diario El País, de España, la eligió como la mejor novela en lo que va del siglo.

Hace pocos años, en un evento de cuentistas en el Café San Ángel, allí en el estacionamiento de Río Grande Mall, escuché a unos jóvenes escritores decir con orgullo que ellos se consideraban bolañistas, que abrazaban la narrativa del autor chileno como la última gran corriente de la literatura contemporánea. Y apenas el verano pasado, el periodista juarense Oswaldo Zavala me comentó que su curso sobre Roberto Bolaño en el doctorado de la Universidad de Nueva York ha sido el más concurrido. ¿Qué demonios está pasando?

Ahora, sólo nos queda preguntarnos si ser el centro de una obra tan monstruosa, tanto por su tamaño como por su relevancia, debe ser tomado como un elogio o un motivo más para reflexionar en lo mal que estamos haciendo las cosas. Aun así, más allá de la muerte, siento como si Bolaño no hubiera escrito aún la última palabra sobre Ciudad Juárez.

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