Además de agudizar la astucia y estimular la concentración, entre otros muchos beneficios, la lectura previene la aparición de la Alzheimer, enfermedad progresiva que afecta a la memoria y otras importantes funciones mentales.
De acuerdo con varios trabajos científicos, como los elaborados por Sociedad Española de Neurología (SEN), indican que mientras se lee, se obliga al cerebro a pensar, a ordenar ideas, a interrelacionar conceptos, a ejercitar la memoria y a imaginar, lo que permite mejorar la capacidad intelectual estimulando la neuronas.
La SEN también indicó que la lectura también genera temas de conversación, lo que facilita la interacción y las relaciones sociales, otro aspecto clave para mantener el cerebro ejercitado.
Otro de los estudios mayormente difundidos, es el de la Universidad de Sussex-Falmer en Inglaterra, en el que una investigación arrojó que la lectura reduce los niveles de estrés hasta en un 68 por ciento.
Esta institución realizó en 2009 un ensayo con la consultora Mindlab International, el cual fue publicado en The Telegraph.
En este trabajo se descubrió que la lectura funciona mejor y más rápido para reducir el estrés que otros métodos tales como escuchar música, salir a caminar o tomarse un té en la tranquilidad del hogar.
Esto tiene que ver directamente a que el cerebro tiene que concentrarse en la lectura, y esa distracción a la que se es llevado a un mundo literario, alivia las tensiones en los músculos y el corazón.
En México, según las estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), difundidas en abril de 2021, señalan que el 71,6% de la población adulta que sabe leer y escribir leyó algún libro, revista, periódico o página de Internet, lo que de acuerdo con el mismo instituto significó una disminución del 9.2 por ciento, comparada con el mismo estudio realizado en 2016.
Sin embargo, se encontró que aunque hay menos lectores, los que quedan, leen más, pues el promedio de los adultos habían leído en el ultimo año 3.7 ejemplares, mientras que en el 2018 fueron 3.1.
El incremento de la lectura se relacionó directamente con el confinamiento derivado de la pandemia ocasionada por el Covid-19.
El estrés está relacionado con la presión arterial alta, insuficiencia cardiaca, diabetes y depresión, entre otros males, así que aparte de tener el privilegio de la magia de la lectura y las buenas historias con sus fascinantes personajes y tramas cautivadoras, el hábito de leer ayuda directamente a la salud.
