La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, declaró ante el Senado estadounidense que México forma parte de una lista de “países adversarios” junto con Irán, Rusia y China, al argumentar que desde estos territorios se pone en riesgo la seguridad de la población estadounidense, particularmente a través del tráfico de drogas como el fentanilo.
«Creo que el presidente Donald Trump lo ha dicho alto y claro: no nos intimidarán y vamos a mantener a Estados Unidos seguro. No sólo de Irán, sino también de Rusia, China y México, de cualquier adversario que intente matarnos o drogar a nuestros hijos», afirmó Bondi en una audiencia con legisladores, al ser cuestionada por el senador republicano Lindsey Graham, de Carolina del Sur.
En el caso específico de México, la fiscal adelantó que su administración tomará acciones contra los responsables del ingreso de drogas ilegales a Estados Unidos, incluso sin la colaboración del gobierno mexicano. «Vamos a ir por ellos con o sin la ayuda de México, porque yo no sé cuál es la respuesta correcta contra un vecino que permite que este tipo de cosas ilegales entren a nuestro país», añadió.
Bondi enfatizó que no se permitirá que estas sustancias sigan afectando a la juventud estadounidense, y aseguró que la administración Trump adoptará una postura firme frente a estas amenazas.
Sheinbaum responde
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, fue consultada sobre las declaraciones de la fiscal estadounidense durante su conferencia de prensa matutina. Respondió de forma breve, señalando que Pam Bondi “no está muy informada” sobre la relación bilateral en materia de seguridad.
“Pues no está muy informada, la verdad, eh”, dijo Sheinbaum desde Palacio Nacional.
La mandataria federal anticipó que este mismo jueves se emitirá un comunicado oficial relacionado con la visita que realizaron recientemente los secretarios de la Defensa Nacional, general Ricardo Trevilla, y de Marina, almirante Raymundo Pedro Morales, al Comando Norte de Estados Unidos. Esta visita, aclaró, fue en reciprocidad a la realizada hace unas semanas por representantes de dicho comando militar a instalaciones mexicanas en Santa Gertrudis, Chihuahua.
Sheinbaum destacó que actualmente se trabaja en el cierre de un acuerdo bilateral en materia de seguridad entre México y Estados Unidos, el cual se ha desarrollado desde la primera reunión celebrada en febrero pasado en Washington. Subrayó que el objetivo es mantener la colaboración entre ambos países “siempre en el marco de la soberanía y del respeto entre gobiernos”.
“Esa es nuestra posición”, expresó, y agregó que México continuará colaborando en materia de seguridad y combate al crimen organizado, pero “sin subordinación”.
Por otra parte, la presidenta afirmó que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos no presentó pruebas concretas que vinculen a CIBanco, Intercam y Vector con operaciones de lavado de dinero. Sostuvo que México “no es piñata de nadie” y exigió respeto a la soberanía nacional.
Aunque aclaró que la Secretaría de Hacienda, junto con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), ya iniciaron investigaciones, subrayó que hasta ahora solo se han detectado faltas administrativas, no delitos. “Si hay pruebas, se actúa. Pero sin pruebas, no puede haber acusaciones”, dijo.
Indicó que las transferencias observadas corresponden a operaciones legales entre empresas chinas y mexicanas. “No se puede hablar de lavado sin sustento”, insistió.
Sheinbaum recordó que México tiene un comercio activo con China por más de 139 mil millones de dólares y reiteró que el sistema financiero nacional es sólido. Añadió que se seguirá solicitando información a Washington.