Con el propósito de fortalecer la limpieza urbana y ofrecer soluciones prácticas a las familias juarenses, el Presidente Municipal, Cruz Pérez Cuéllar, encabezó el arranque del programa Mega Destilichadero en la colonia Hidalgo, una iniciativa de la Dirección de Limpia que busca facilitar la recolección de residuos voluminosos como muebles, colchones y llantas que no son atendidos por los camiones convencionales.
Durante el evento, el alcalde estuvo acompañado por el director de Limpia, Gibran Solís Kanahan, y vecinos del sector, quienes celebraron el inicio del programa al considerarlo una respuesta directa a una de las principales problemáticas de su comunidad: la acumulación de desechos en banquetas y espacios públicos.
Solís explicó que esta nueva estrategia representa una evolución de los programas implementados anteriormente, como los Puntos Limpios, y permitirá atender de manera más eficiente a las colonias, especialmente aquellas con una alta presencia de adultos mayores. “Después de recuperar el servicio de recolección de basura en toda la ciudad, detectamos la necesidad de ayudar a las familias a deshacerse de objetos que no pueden mover por sí mismas. El Mega Destilichadero es la respuesta a esa demanda”, comentó.
El programa contempla la participación de entre cinco y ocho unidades de trabajo y la instalación de cajas contenedoras para aumentar la capacidad de recolección. Además, se proyecta realizar jornadas similares cada 15 días en distintos sectores de la ciudad, priorizando las zonas con mayores rezagos.
Pérez Cuéllar subrayó que este tipo de acciones reflejan el compromiso de su administración con la mejora del entorno urbano y el bienestar social. “Seguimos cumpliendo la palabra de acercar los servicios públicos a las y los juarenses. Una ciudad limpia también es una ciudad más segura y con mayor calidad de vida”, afirmó.
Por su parte, la vecina Patricia Guadalupe Buie Peña, con más de tres décadas viviendo en la colonia Hidalgo, agradeció al alcalde por atender una necesidad que, dijo, afecta la movilidad y seguridad de los habitantes. “Había tanto tiliche que ya los adultos mayores no podían caminar por las banquetas y tenían que bajarse a la calle. Esto nos devuelve orden y tranquilidad”, expresó.

