Este día se confirmó el fallecimiento de Mario Vargas Llosa, novelista de origen peruano que fue la mente maestra detrás de obras como La ciudad y los perros o La casa verde. El autor falleció a la edad de 89 años, dejando una marca indeleble en el ámbito literario a nivel mundial al haber sido laureado con el Premio Nobel en 2010.
La noticia de su deceso fue confirmada por su hijo, Álvaro Vargas Llosa, a través de un comunicado oficial donde lamentó la pérdida del ilustre escritor: “Con profundo dolor, hacemos público que nuestro padre, Mario Vargas Llosa, ha fallecido hoy en Lima, rodeado de su familia y en paz…”. En el mismo comunicado, se aclaró que, por voluntad del escritor, no se llevará a cabo ninguna ceremonia pública, y sus restos serán incinerados.
Según fuentes cercanas, la causa de muerte fue una enfermedad que fue deteriorando su salud en los últimos meses.
En vida, Vargas Llosa no sólo fue reconocido por su prolífica y brillante trayectoria literaria, sino también por sus posturas ideológicas, que generaron profundas polémicas, particularmente en países como México. A lo largo de su carrera, fue un férreo crítico de los gobiernos de izquierda en América Latina, lo que le ganó tantos admiradores como detractores.
En marzo de 2011 recibió la Orden Mexicana del Aguila Azteca de manos del presidente Felipe Calderón, quien alabó su lucha por la libertad y la democracia, además de su contribución a la literatura.

“Aprecio las palabras del presidente Calderón sobre mi posición política, sabiendo que en algunos momentos de mi vida yo he criticado México y lo he criticado con mucha severidad”, dijo el escritor peruano.
“Qué bien habla de la cultura, de la civilización y también del espíritu democrático de México, el que pese a esas severas críticas, en lugar de vetarme y censurarme, me abran los brazos y me premien”, añadió Vargas Llosa.
Uno de sus momentos más comentados ocurrió en septiembre de 2021, durante el foro Los desafíos de la libertad de expresión, en la Universidad de Guadalajara. Ahí, criticó al presidente Andrés Manuel López Obrador por sus conferencias matutinas: “No me gusta la figura de un presidente que se exhibe todas las mañanas comentando los artículos que lee en la prensa… no me parece que sea la función de un presidente”.
Estas declaraciones surgieron luego de que se le informara que AMLO había declarado respetar su libertad de expresión durante su estancia en México. Vargas Llosa respondió: “Tengo la impresión que varias veces se ha referido a mí de una manera muy negativa. Es su derecho, desde luego”.
Años antes, en 2019, durante su participación en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, el escritor retomó su célebre concepto de «la dictadura perfecta» —acuñado originalmente en 1990 para describir el sistema priista— y advirtió que el país podría regresar a ese modelo bajo el gobierno de López Obrador.
“México comenzaba a salir de esa ‘dictadura perfecta’… y me temo muchísimo que el populismo que parece realmente la ideología del actual presidente de México nos conduzca otra vez a la ‘dictadura perfecta’”, expresó entonces.
Su afinidad política se inclinó abiertamente hacia la derecha y los gobiernos conservadores. En octubre de 2023, durante la Jornada Cultural de la Fundación Internacional para la Libertad, elogió públicamente al expresidente Felipe Calderón, a quien calificó como un “dirigente político distinguido y respetable”, lo que le generó una gran crítica en el país.