Luego de la gran guerra
atados de pies y manos
nos tiraron en la cima de un rascacielos
ahí nos torturaron durante meses
obligándonos a ver películas pornográficas
sin cesar
Tal vez porque nos mantenían famélicos
aquel espectáculo era muy doloroso
Uno de mis camaradas tenía sus ojos
y el brazo izquierdo
cubiertos de pequeñas explosiones
su hedor a cobre y cable quemado
me hacía sentir una especie
de viscosidad en la boca del estómago
un sabor a metal
A veces, en las madrugadas
venía el Rey a amedrentarnos
con el muñón de su pantorrilla
agitándolo contra nuestras bocas
y nuestros ojos
La última vez que lo vimos
orinó sobre nuestras cabezas
y su muleta tenía incrustaciones brillantes
En la azotea había algunos pinos navideños
y cada tercer día venía una mosca enorme
por una esfera
el batido de sus alas, al llegar y al irse
era lo único que refrescaba un poco el aire
Se terminaron las esferas y vinieron
por los celadores en un helicóptero
antes de irse rompieron la pantalla
arrojaron sus máscaras al vacío
y bloquearon los accesos al edificio
Para entonces, mi camarada del brazo roto
estaba convertido en basura
le habían extraído el cobre y el litio
lo que veíamos después del andamio
en el que aterrizaba la mosca
era el único futuro al que podíamos ir.
Va llena de leche
vente
juntaré
en frasquitos
el agua
que te
sale
cuando
te arqueas
la regaré
en el jardín
es un pulpo, dices
alguien lo puso ahí
dentro
cuando nací,
cerquita
del ombligo
se quedó a vivir
se mueve
hacia
mis costillas;
quiero creer que
encuentra
un calor distinto
se agita
si lo acaricias;
así me arqueo
vente
qué bien que lo ganes todo
que nada te duela
que lo sepas todo
que no puedas detenerte a esperar a nadie
que tu piel y tu actitud sean tan blancas
que el mundo te quede pequeño
qué bien que gastes tanto tiempo mirándote el ombligo
no existe nada parecido a tu ombligo
qué oportunas son tus opiniones
qué impecables suenan tus juicios
en ese balcón donde te sientas a vigilarlo todo
aplastas a tus adversarios
como si fueran liendres
tu régimen tiene el potencial
de una dictadura maravillosa
no tarda en alcanzarte la fama
nos educarás
nos salvarás
pondrán tu
retrato en las calles
harán esculturas
de tu imagen
como hicieron
con Hitler y Stalin
algo de ellos anida en ti
algo hay de marcial
en tu disciplina;
en tu manera
de contraer el ceño
tienes razón
al burlarte
no somos como tú
salimos de la mierda
en ese tiempo
era un lago rojo
gelatinoso
entre edificios
abandonados
más allá de la periferia
estaba la guerra
en su esplendor
cambiaban los colores
del paisaje en cada explosión
mi hermano menor
salió con las fosas nasales
atascadas de un plasma amarillo,
le costaba respirar
mi hermana mayor
salió con los ojos
infectados y llenos
de lágrimas,
le costaba ver
a mí me faltaban
tres dedos en la
mano izquierda
se desintegraron
en el lago, supongo
luego mis hermanos
fueron a la guerra
y desaparecieron
mi madre era bailarina
pero esa historia
ya la conoces
sólo quedé yo
vente entonces
deja caer el líquido
tíralo sobre mí
descansarás de tanto
pensar en las leyes
y los uniformes que estás diseñando
lo prometo
verás cómo la tierra que caminas
solo es la espalda de una ballena de leche.
——————————

Israel López Solano (México, León Guanajuato). Estudió Historia en la Universidad de Guanajuato, Publicó Galería para fumadores (Colección Pasavante/Grafográfxs, 2021). Trabaja en una galería para fumadores.