Las lluvias que azotaron el poniente de Ciudad Juárez esta semana no solo provocaron encharcamientos y cortes viales, sino que evidenciaron de nuevo la vulnerabilidad de cientos de viviendas ubicadas en zonas de alto riesgo. En respuesta, el Gobierno Municipal continúa levantando un censo para dimensionar los daños y planear posibles reubicaciones.
Aunque los trabajos siguen en curso, el alcalde Cruz Pérez Cuéllar informó que ya se tienen detectadas al menos 250 casas afectadas, de las cuales 30 presentan daños severos que podrían hacerlas inhabitables. La información preliminar sugiere que muchas de estas construcciones están asentadas en zonas con problemas estructurales crónicos.
“No es solo reconstruir, sino evaluar si vale la pena volver a levantar viviendas en lugares donde la próxima lluvia fuerte volverá a dejarlas en ruinas”, expresó el presidente municipal durante una supervisión en campo.
Las brigadas municipales permanecen activas este viernes para actualizar la cifra de afectados, ya que las lluvias del jueves podrían haber agravado la situación. En paralelo, se continúa con labores de limpieza y desazolve en los sectores más golpeados por la acumulación de agua.
En cuanto a los daños en vialidades, el municipio señaló que no comenzarán las reparaciones hasta tener una evaluación completa del impacto, aunque ya se han registrado reportes ciudadanos por hundimientos y baches en distintas colonias.
El alcalde reiteró que se buscará apoyo de los gobiernos estatal y federal para atender la emergencia y destacó que se está actuando con cautela para definir las zonas donde sería inviable permitir que las personas regresen a vivir.
