Las lluvias que azotaron a Ciudad Juárez durante los últimos días han dejado una estela de destrucción en el norponiente de la ciudad, donde calles anegadas, viviendas dañadas y vehículos arrastrados por la corriente dibujan el panorama de emergencia que enfrentan cientos de familias. Ante la magnitud del desastre, autoridades municipales instalaron un Centro de Mando en la zona para coordinar los esfuerzos de atención integral.
El director de Protección Civil Municipal, Sergio Rodríguez, informó que personal de 19 dependencias municipales trabaja de forma conjunta no solo en el levantamiento del censo de viviendas afectadas, sino también en tareas de limpieza, atención médica, apoyo psicológico y canalización de recursos a las personas damnificadas.
“Estamos trabajando desde el miércoles por instrucción del Presidente Municipal, Cruz Pérez Cuéllar. Llevamos un avance del 80 por ciento en el censo, aunque la lluvia de ayer entorpeció parte del trabajo. Ya se contabilizan unas 250 viviendas afectadas”, explicó Rodríguez. Señaló que varias de estas casas, inicialmente clasificadas en código verde o naranja, podrían haber pasado a código rojo tras las nuevas precipitaciones.
Las brigadas municipales, conformadas por aproximadamente 190 trabajadores, se han desplegado principalmente en la colonia Fronteriza Baja, aunque la cobertura se ha extendido a otras zonas de la ciudad. Protección Civil pidió a la ciudadanía que, en caso de requerir apoyo derivado de las lluvias, se comuniquen al número de emergencia 911 para recibir atención.
Paralelamente, la Dirección General de Obras Públicas ha intensificado las labores de retiro de escombros con maquinaria pesada. Hasta esta tarde, se han eliminado alrededor de 300 toneladas de residuos en diversas colonias, incluyendo tierra de arrastre, lodo, basura y maleza. Los puntos más afectados incluyen el Arroyo De las Víboras, la calle Isla Kiska en la colonia Plutarco Elías Calles, y el Arroyo Loreto en la colonia Fronteriza.
Además del despeje de calles, el personal también ha asistido directamente a vecinos y vecinas en la limpieza de accesos a sus viviendas, muchos de los cuales quedaron cubiertos de lodo tras las corrientes.
Las autoridades informaron que las labores continuarán en los próximos días, con el objetivo de restablecer condiciones mínimas de habitabilidad y seguridad en las zonas más golpeadas. El Centro de Mando instalado en el norponiente de la ciudad seguirá operando como punto de coordinación interinstitucional para responder de manera ágil y directa a la emergencia.
