En un acto que resalta el compromiso con la educación y el bienestar social, Elizabeth Nieto, directora de la escuela Primaria Federal Francisco González Bocanegra, presentó las condiciones en las que se desarrollan las actividades educativas y culturales del centro escolar.
Este evento reunió con artistas nacionales, estatales y locales que se encuentran realizando actividades sociales y culturales en la ciudad.
Frente a un mural elaborado por alumnos y maestros, Nieto expuso detalladamente las iniciativas que se llevan a cabo durante la semana cultural de la escuela, un evento en el que los estudiantes participan activamente. El recorrido por las instalaciones incluyó una visita al espacio destinado a la biblioteca, donde se ofreció una plática con el fin de replicar las experiencias positivas en otras comunidades.

Un aspecto destacado de esta escuela es la ausencia de una tiendita tradicional; en su lugar, opera un comedor que proporciona alimentación gratuita a todos los estudiantes. Este comedor es el resultado del esfuerzo colectivo de padres de familia, quienes han consolidado una variedad de recetas provenientes de diferentes regiones del país, desde Chiapas hasta las zonas más remotas de Veracruz y Coahuila.

La escuela se encuentra en una zona marcada por altos índices de violencia, pobreza y problemas sociales, lo que hace aún más valioso el trabajo que se realiza para que el proyecto educativo crezca y beneficie a cientos de niños.
Antes de la implementación del comedor, muchos estudiantes llegaban a la escuela con hambre, lo que les llevaba a quedarse dormidos en clase o, en el peor de los casos, a sufrir desmayos. Actualmente, los padres aportan solamente 10 pesos diarios, mientras que los recursos adicionales se obtienen a través del apoyo social.
La historia del comedor no ha estado exenta de desafíos. El primer comedor que se construyó fue destruido intencionalmente hace años, tras la denuncia de los maestros sobre la problemática del narcomenudeo en los alrededores del plantel. La maestra Monserrat, quien participó en este proceso, explicó que los docentes se sienten parte integral del proyecto y tienen un fuerte arraigo con la comunidad.
“Todos venimos de la necesidad. Vemos el hambre de los niños, y la mayoría de los maestros crecimos en situaciones similares, por lo que nos identificamos con ellos”, comentó Monserrat, quien ha sido reconocida como una activista comprometida con la lucha social a favor de los niños vulnerables.

Nieto, no solo es conocida por organizar protestas de gran impacto, como el cierre de carreteras, para exigir al Estado la entrega de libros escolares, sino por su lucha para alimentar a los sectores vulnerables, como el de Riberas del Bravo.

La labor de la escuela Primaria Federal Francisco González Bocanegra es un ejemplo inspirador de cómo la educación puede ser un motor de cambio social, brindando no solo conocimientos, sino también sustento y esperanza a una comunidad que enfrenta grandes adversidades.

