Mientras las autoridades de Estados Unidos han mantenido en secreto durante un año el destino de Ismael “El Mayo” Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa, el gobierno mexicano reportó una contundente disminución del 50 por ciento en el tráfico de fentanilo hacia territorio estadounidense, como resultado de operativos intensificados y la destrucción de laboratorios clandestinos en el país.
A un año de la sorpresiva captura de Ismael “El Mayo” Zambada en suelo estadounidense, México continúa exigiendo explicaciones. Durante su conferencia matutina de este jueves, la presidenta Claudia Sheinbaum reiteró que su gobierno ha solicitado insistentemente un informe detallado a Washington sobre la detención del histórico líder del Cártel de Sinaloa, ocurrida el 25 de julio de 2025.
Zambada fue aprehendido junto a Joaquín Guzmán López, hijo de “El Chapo”, cuando ambos viajaban en una aeronave que despegó de territorio mexicano. La operación se llevó a cabo sin participación de autoridades nacionales, lo que detonó reclamos inmediatos desde el final del sexenio de Andrés Manuel López Obrador.

“Seguimos insistiendo. Depende del Gobierno de Estados Unidos dar toda la información, pero vamos a seguir insistiendo”, dijo Sheinbaum desde Palacio Nacional. Subrayó que hay disposición a colaborar “sin subordinación”, en un marco de respeto mutuo a la soberanía.
Mientras se alistan nuevos cargos, la audiencia de Zambada está programada para el próximo 25 de agosto. Según analistas, podría definirse si el Departamento de Justicia busca la pena de muerte contra uno de los capos más longevos y escurridizos del narco mexicano.
Durante la conferencia matutina de este jueves, la presidenta informó que, desde su toma de posesión en octubre pasado, se ha logrado contener la salida de grandes cantidades de fentanilo gracias a la estrategia nacional de seguridad, independientemente de qué grupo delictivo esté detrás del trasiego.
“Esto significa que más fentanilo es incautado en México y ya no cruza la frontera hacia Estados Unidos”, afirmó la mandataria, quien subrayó que incluso las propias autoridades estadounidenses reconocen este descenso.
La jefa del Ejecutivo detalló que durante su administración se han desmantelado mil 193 laboratorios de metanfetaminas, afectando de forma significativa la estructura financiera del crimen organizado. Según estimaciones oficiales, los golpes asestados por las fuerzas de seguridad representan una pérdida de aproximadamente 43 mil millones de pesos para las organizaciones criminales, como resultado de decomisos, detenciones e incautaciones de armas.
Sheinbaum también insistió en que la cooperación bilateral debe ser de ida y vuelta. “Nosotros hacemos nuestra parte. Es necesario que del otro lado también asuman su responsabilidad. La lucha contra la distribución y venta ilegal de fentanilo en las ciudades de Estados Unidos no puede ser sólo de un lado”, advirtió.