El nuevo cierre de la frontera entre México y Estados Unidos para la exportación de ganado vivo, bisontes y caballos mexicanos ha generado reacciones inmediatas en el ámbito político, particularmente en Chihuahua. Arturo Medina, Coordinador de los diputados del PRI en el Congreso del Estado, aprovechó la coyuntura para lanzar fuertes críticas contra el Gobierno Federal, a quien responsabilizó por la medida tomada por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA).
La decisión estadounidense fue anunciada tras confirmarse un nuevo caso de gusano barrenador en el estado de Veracruz. De acuerdo con medios estadounidenses, Brooke Rollins, secretaria de Agricultura de ese país, informó que el cierre es una medida de contención y que se pausarán las reaperturas planificadas de los puertos fronterizos hasta que se constate un mayor avance en el combate a esta plaga. Apenas días antes, la frontera había sido reabierta tras casi dos meses de cierre que representaron pérdidas por alrededor de 700 millones de dólares en exportaciones mexicanas, según el Consejo Mexicano de la Carne.
Medina señaló que el Gobierno Federal incurrió en un “falso triunfalismo” al celebrar la reapertura y acusó a la Federación de relajar los protocolos necesarios para contener el brote. “Lo advertimos ante el anuncio de la apertura de la frontera en días recientes. No debíamos bajar la guardia, el riesgo de un nuevo cierre estaba latente, pero la federación se embriagó de un falso triunfalismo”, manifestó a través de un comunicado.
El legislador recordó que su partido había solicitado el cierre de la frontera sur del país para contener internamente la expansión del gusano barrenador. Lamentó que, en su opinión, las medidas implementadas no hayan sido lo suficientemente rigurosas para erradicar la plaga.
“Es triste que los ganaderos chihuahuenses, que son extremadamente cuidadosos y establecen buenos controles en coordinación con el Gobierno del Estado, tengan que pagar por la irresponsabilidad de otros que operan en descuido”, sostuvo.
Además, Medina anunció que buscará acelerar la aprobación de una iniciativa presentada previamente para sancionar a quienes faciliten la propagación de plagas y enfermedades en el ganado. Aseguró que esta medida busca fortalecer la sanidad del hato chihuahuense.
En contraparte, la Presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, calificó la decisión del USDA como “totalmente exagerada” y aseguró que el caso detectado en Veracruz está bajo control. “Lo mejor que podemos hacer es seguir trabajando en coordinación con la Secretaría de Agricultura y mostrarles que es una medida exagerada frente a una situación que está bajo control”, dijo.
Sheinbaum precisó que la reapertura previa de la frontera no fue una decisión unilateral, sino resultado de dos meses de trabajo técnico conjunto entre el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) y su contraparte estadounidense. Explicó que existen protocolos y una serie de indicadores científicos que guían estas decisiones.
“La apertura de la frontera por parte de Estados Unidos no fue algo subjetivo”, sostuvo, reiterando que las instituciones mexicanas continúan aplicando las medidas sanitarias pertinentes. Agregó que el secretario de Agricultura, Julio Berdegué, permanece en contacto con las autoridades ganaderas y agrícolas del país, a pesar de encontrarse enfermo.
Mientras persiste el cierre, el impacto económico sobre los productores ganaderos continúa. Sin embargo, el Gobierno Federal insiste en que los protocolos se mantienen activos y que el brote está contenido, por lo que confía en que la frontera pueda reabrirse pronto.

