La escalada militar en torno a Venezuela encendió nuevas alertas internacionales luego de los recientes ataques atribuidos al ejército de Estados Unidos en aguas del Caribe y el océano Pacífico. Ante este escenario, Rusia advirtió sobre el alto nivel de riesgo que implica el aumento de la tensión y reiteró su respaldo político y diplomático al gobierno venezolano.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, señaló que la situación representa un “riesgo extremo” y confirmó que Moscú mantiene comunicación permanente con Caracas, incluso al más alto nivel.
De acuerdo con información difundida por la agencia TASS, el presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, sostuvieron conversaciones telefónicas recientes para abordar el desarrollo de la relación bilateral y reafirmar su cooperación en distintos ámbitos.
Las declaraciones de Rusia se produjeron después de que el gobierno venezolano solicitara una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU, al denunciar una “agresión criminal” por parte de Washington y exigir un alto al fuego tras los ataques que ya habrían dejado al menos 90 personas fallecidas.
En paralelo, China expresó su apoyo a Venezuela y rechazó el “bloqueo completo” anunciado por el presidente estadounidense Donald Trump contra embarcaciones que entran y salen del país sudamericano. Pekín calificó la medida como intimidación unilateral y respaldó la convocatoria a una sesión de emergencia en Naciones Unidas, en medio del aumento de la presencia militar estadounidense en la región.

