En un acto multitudinario en Sinaloa, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo informó que, tras una reunión bilateral con funcionarios de Estados Unidos, se alcanzó un acuerdo inédito para que Washington refuerce los operativos en su propio territorio con el fin de detener el flujo de armas hacia México.
La mandataria subrayó que este paso representa un giro en la relación binacional en materia de seguridad, pues por primera vez el tema de las armas fue colocado como prioridad en la agenda. “Siempre dicen en Washington que el problema es lo que va de México a Estados Unidos; ahora logramos que se discuta lo que viene de allá para acá”, sostuvo.
Sheinbaum recalcó que este entendimiento se da en un contexto marcado por la violencia en la entidad, derivada de la disputa interna del cártel de Sinaloa, y aseguró que su gobierno mantendrá el despliegue de fuerzas federales en apoyo a la población. “Cada quince días el gabinete de seguridad viene a Sinaloa y así seguirá siendo”, prometió.
Acompañada por el gobernador Rubén Rocha, la presidenta reiteró que su administración apuesta por la coordinación con Washington, pero sin ceder soberanía: “Sí a la colaboración, no a la subordinación”, enfatizó.